Pabellón criollo

El pabellón criollo es uno de los platos tradicionales dentro de la gastronomía venezolana. Su origen se encuentra, según parece ser, en el siglo XVIII cuando surgió como una forma de aprovechar los restos de otras comidas preparados por los esclavos de la colonia. El pabellón criollo es un plato en el que se combinan diferentes ingredientes, siendo los principales el arroz blanco, la carne mechada, algunas rebanadas de plátano maduro frito y frijoles negros. Sin duda, es el plato idóneo con el que sorprender a tus familiares durante una comida. Contundente, delicioso y, sobre todo, muy original. Aprende a preparar el pabellón criollo en tu propia cocina y transporta a todos tus comensales al centro del país venezolano.

Elaboración de pabellón de criollo

Al igual que ocurre siempre que se va a preparar un plato con legumbres, éstas hay que ponerlas a remojo antes. En el caso de los frijoles, bastará con ponerlos en agua durante 4 horas. Luego escúrrelos bajo el agua del grifo y mételos en una cazuela. Cúbrelas con abundante agua y agrega también ½ cebolla cortada y una pizca de sal. Pon a cocinar a fuego medio durante 1 hora y media, hasta que los frijoles estén blanditos. Mientras tanto, puedes ir preparando la carne mechada. Para ello, sazona los 500 gramos de carne con un poco de sal, pimienta negra molida y comino. Luego pon una cazuela en el fuego y sella la carne en ella por todos lados. Luego retírala y resérvala.

El siguiente paso será pelar y cortar 1 cebolla entera en pequeños trozos, haciendo lo mismo con 1 pimiento rojo, los 2 tomates y los 2 dientes de ajo. Luego echa un poco de aceite en la cazuela en la que has sellado la carne y, cuando esté caliente, incorpora las verduras para que se pochen. No te olvides de remover de vez en cuando con una cuchara de palo para que las verduras no se peguen. Cuando ya estén las verduras hechas, incorpora de vuelta la carne a la cazuela y echa agua suficiente como para que cubra todos los ingredientes del interior. Añade también 1 rama de cilantro, 1 cucharada pequeña de comino y sal y pimienta negra al gusto. Por último, tapa la cazuela y deja que todo se cocine durante 1 hora y media. Pasado ese tiempo, saca la carne de la cazuela y córtala en tiras. Estará tan blandita que podrás deshilacharla fácilmente con las manos. Luego incorpórala de nuevo a la cazuela y remueve para que se integre con el resto de los ingredientes.

Cocina durante una hora en una cazuela la cebolla, pimientos, tomates y ajos

Una vez tengas la carne y los frijoles preparados, es el momento de cocinar el sofrito para echar a estos últimos. Pica el resto de la cebolla que te ha sobrado, haciendo lo mismo con el pimiento rojo y los 2 dientes de ajo. Sofríelo durante unos minutos en la sartén y, cuando la cebolla haya adquirido una textura transparente, incorpora el sofrito a la cazuela con los frijoles. Vuelve a poner en el fuego para que se cocinen durante otra media hora y, por último, echa un poco más de comino y de pimienta negra molida y rectifica de sal si fuera necesario. En caso de que los frijoles hayan quedado con demasiada agua puedes retirar un poco.

Mientras los frijoles terminan de hacerse puedes ir preparando el arroz blanco. En una cazuela echa un chorrito de aceite y ponlo a calentar a fuego medio. Luego agrega los 300 gramos de arroz y sofríe durante unos minutos removiendo con una cuchara de palo. A continuación, agrega 3 tazas de agua y deja a fuego fuerte hasta que empiece a hervir. En ese momento, sazona con sal al gusto, baja a fuego medio y deja que el arroz se termine de hacer con la tapa puesta. Aproximadamente 10 minutos después, comprueba si el agua se ha consumido y han aparecido pequeños agujeros. Si es así, baja el fuego al mínimo durante 3 minutos antes de apagarlo por completo. Deja que el arroz repose hasta el momento de montar el plato.

Esta es una receta tradicional venezolana con una mezcla deliciosa de sabores

Por último, corta los 2 plátanos maduros en rodajas más o menos gruesas. Echa abundante aceite en una sartén onda y, cuando éste esté caliente, incorpora el plátano para que se fría durante unos minutos. Cuando ya tenga una tonalidad dorada, sácalo de la sartén y déjalo reposar en un plato con papel de cocina para que absorba el aceite sobrante. Ahora ya sólo te quedará montar el pabellón criollo para servírselo a tus comensales. Pon un poco de todos los ingredientes -arroz blanco, frijoles, carne mechada y plátano frito- en un mismo plato y deja a todos tus invitados con la boca abierta.