Verduras al horno

A muchas personas les supone un gran esfuerzo el hecho de tener que comer verduras o introducirlas en su dieta. Ya bien sea porque quieren perder peso o mejorar su estado de salud, es probable que muchos hayan tomado conciencia de lo importante que es consumir estos alimentos de manera diaria por el bien de su organismo.

Las verduras, además de tener muy pocas calorías y ser altamente saciantes, tienen muchas vitaminas que nos ayudarán a mejorar el estado de nuestra salud, ya bien sea a nivel intestinal como con muchas otras propiedades. Por eso, en toda dieta sana y equilibrada se deberían consumir, al menos, entre tres y cinco piezas de fruta y verdura de manera diaria.

Sin embargo, cómo se cocinan ciertos alimentos puede influir en que estos dejen de ser tan sanos como lo serían en su forma original. Así pues, podrías estar añadiendo calorías y grasas innecesarias al cocinar las verduras con demasiado aceite, freírlas o bien con salsas poco sanas. Por eso, lo más recomendable es cocinarlas al vapor, a la plancha o al horno. Estos métodos no implican la utilización de exceso de aceite o de otros ingredientes y, con la cocción adecuada y las especias que más te gusten, podrás realizar un plato delicioso, disfrutando de todas las propiedades que las verduras tienen para tu salud, indiferentemente de que quieras perder peso o simplemente quieras cuidar de tu cuerpo como se merece.

Elaboración de las verduras al horno

Lo primero que tendremos que hacer será precalentar el horno a 200 grados en modo ventilador, para que el calor se reparta bien por toda la superficie y no como el grill que calienta solamente en la parte superior o inferior.

El primer paso será lavar y trocear las verduras mientras se calienta el horno

Mientras se está calentando el horno cogeremos una bandeja para el mismo y colocaremos un papel vegetal encima. Limpiaremos bien todas las verduras y dejaremos que pierdan parte de la humedad. Pelaremos el boniato y las zanahorias y los cortaremos a tiras finas, pero no demasiado ya que sino en el horno podría quemarse con facilidad.

Del pimiento y del calabacín podemos mantener la piel si lo deseamos, por lo que tendremos que lavarlos bien. Corta el pimiento a tiras, como has hecho con el boniato y las zanahorias, y el calabacín a rodajas, también de cierto grosor para que no se quemen con facilidad en el horno, al igual que deberás hacer con la berenjena.

Lava bien el medio brócoli y la media coliflor y corta solamente los arbolitos. Intenta que te salgan arbolitos pequeños, porque así serán más fáciles de servir y de consumir en un bocado. Limpia bien las setas y quítales el tallo. Corta la parte superior en trozos no demasiado finos y ves colocando todas las verduras sobre la bandeja del horno con el papel de cocina por encima. Intenta que quede un espacio entre cada trozo de verdura, porque si quedan montados unos encima de otros no llegarán a cocinarse de manera uniforme y puede que los que han quedado tapados queden un poco crudos.

Este plato tiene pocas calorías y sus alimentos son saciantes

Aliña las verduras con un leve chorrito de aceite de oliva virgen extra y añade también una pizca de sal por encima. En el caso de que quieras darle un toque especiado a tus verduras puedes sazonarlas con las especias que más te gusten, como un toque de pimienta, una espolvoreada de tomillo, una pizca de jengibre, polvos de salsa al curry o unas hojitas de romero.

Coloca la bandeja en el horno y espera entre diez y quince minutos. Ves controlando que las verduras se vayan cocinando de manera uniforme y gira la bandeja o retírala del horno en el caso de que sea necesario. Cuando estén en su punto, retira la bandeja del horno y deja que se enfríe ligeramente el contenido de la misma antes de servirlo en una fuente o en un plato para los invitados.