Hojaldre de verduras

Con la llegada de las Navidades se empiezan a acumular las comidas familiares y las celebraciones con amigos y el menú es uno de los elementos más importantes. El hojaldre de verduras es una opción perfecta si quieres huir de los platos más típicos, además que es ideal para cuidar los excesos de las fiestas y para invitados vegetarianos. En esta receta se utilizan verduras como el calabacín o el pimiento, pero tú puedes añadir otras o sustituirlas por las que más te gusten como la berenjena, las espinacas o los champiñones. Además, el queso feta les da un toque único y diferente que seguro que a muchos les encantará. Ya sea como aperitivo para ir abriendo boca o bien como primer palto acompañado de una ensalada, anímate a preparar este hojaldre de verduras y seguro que repetirás muy pronto.

El hojaldre de verduras es una opción perfecta si quieres huir de los platos más típicos

Elaboración

El primer paso para hacer esta deliciosa receta de hojaldre de verdura será colocar la masa de hojaldre sobre la bandeja del horno en la que lo vayas a hornear. Pon antes un poco de papel vegetal o papel de hornear para que luego no se pegue y puedas desmoldarlo fácilmente. Luego pela y pica la cebolla y echa un chorrito de aceite de oliva en la sartén. Pon a calentarlo y luego pocha la cebolla durante unos minutos. Mientras tanto, lava el pimiento rojo y quítale el pedúnculo; luego ábrelo por la mitad y límpialo de pepitas y restos de pellejos. Por último, córtalo en tiras finas y cortas. En el momento en el que la cebolla haya adquirido una tonalidad transparente, añade el pimiento rojo a la sartén. Sazona con sal y pimienta negra al gusto, remueve y deja que se sofría durante unos 4 o 5 minutos más. A continuación, pela el calabacín y luego córtalo en pequeños cubos, siendo éste el siguiente ingrediente que tendrás que añadir al relleno que se está preparando en la sartén.

Remueve de nuevo y sazona con hierbas provenzales al gusto. Por último, corta los 100 gramos de queso feta en cuadrados pequeños e incorpóralo al resto de las verduras. Remueve y prueba el punto de sal por si fuera necesario rectificarlo. Deja que se cocine todo durante un par de minutos más y luego extiende el relleno sobre la hoja de hojaldre que has estirado en la bandeja del horno. Lo mejor es que el relleno lo coloques en el centro para que luego puedas cerrar el hojaldre por los lados. Aunque otra opción es colocar directamente otra hoja de hojaldre encima y hacer una especie de empanada de verdura. Por último, pon a calentar el horno a 210ºC y, mientras tanto, bate el huevo y pinta con él la superficie del hojaldre. Tras 20 minutos en el horno comprobarás que el hojaldre ha adquirido un bonito tono dorado y ya podrás servírselo a tus comensales.

El hojaldre de verduras es el plato perfecto para compensar los excesos de las fiestas

Receta para hacer el hojaldre casero

A la hora de preparar cualquier receta con hojaldre puedes optar por comprarlo o hacerlo casero. Si te decantas por esta última opción tendrás que poner en un recipiente hondo 500 gramos de harina y hacer un pequeño agujero en el centro donde incorporar 250 mililitros de agua, una pizca de sal y 60 gramos de mantequilla ya derretida. A continuación, pasa a trabajar la masa con las manos hasta que ésta empiece a tomar cuerpo. Luego ponla encima de una encimera cubierta con un poco de harina y sigue trabajándola durante 10 o 15 minutos más. Tampoco hay que estar demasiado tiempo amasándola, tan solo lo suficiente como para que los ingredientes se integren, ya que si no quedaría demasiado elástica. Por último, haz una bola con la masa y métela en el bol tapada con un paño de cocina limpio. Luego deja que repose durante 45 minutos en la nevera. Cuando haya pasado el tiempo indicado, saca la masa del frigorífico y ponla en una encimera previamente enharinada.

Con un rodillo de cocina estírala un poco y luego coloca en el centro 350 gramos de mantequilla a temperatura ambiente. Es importante que este ingrediente lo saques de la nevera unas horas antes de comenzar con la receta para que se caliente un poco y luego puedas trabajarla sin problema. Dobla la masa sobre si misma para que cubra la mantequilla y comienza a trabajarla de nuevo con movimiento rápidos y estirando siempre en la misma dirección. Cuando esté estirada dobla ambos extremos hacia el centro, quedando uno sobre otro. Es decir, deberá tener forma de G, como si estuviera doblada en forma de tríptico. Luego gira un cuarto de vuelta y estira la masa de nuevo con el rodillo y repite el doblado. Por último, envuelve la masa en papel film y deja que se enfríe en la nevera durante 30 minutos. Después habrá que repetir el proceso de doblado y estirado 3 o 4 veces más, dejando que repose 20 minutos en la nevera después de cada uno. Finalmente, cuando quieras utilizarla tan solo tendrá que cortar una porción del tamaño y grosor que necesites y estirarla con el rodillo para darle la forma adecuada.