Pulled pork

¿Has oído hablar del pulled pork? Hoy te contamos qué es y cómo se preparar esta rica receta.

Es una receta que tradicionalmente es de Estados Unidos, se está convirtiendo en un método muy popular de preparar la carne de cerdo. Consiste en ahumarla en caliente y lentamente, de forma que quede tan tierna que se puede separar con los dedos. Se puede añadir también salsa barbacoa para acompañarla, dependiendo así del gusto.

Elaboración

En primer lugar, tenemos que marinar la carne. La carne de cerdo para preparar nuestro pulled pork debe ser de una sola pieza, pero puedes elegir la parte del cerdo que más te guste; cuello, jamón, paleta, aguja o cabeza, por ejemplo.

La carne tiene que estar bien mechada

En un bol mezcla todas las especias; comino, pimentón, ajo, pimienta, tomillo, sal, canela, las 3 cucharadas de agua soperas y la salsa inglesa. Debes de mezclar todos estos ingredientes hasta obtener una salsa. Una vez la tengas, con una brocha de cocina unta toda la carne, quedará rojiza. Lo conveniente es que la líes en papel film y la dejes reposar durante una noche en la nevera para que coja todo el sabor. Si dispones de poco tiempo, déjala reposar al menos durante 45 minutos.

En una olla grande, echa un chorreón de aceite de oliva y a fuego medio pon la pieza de carne dentro para marcarla. Este paso solo serán 4 o 5 minutos. Retira la carne de la olla y echa un chorreón de aceite, y pon la cebolla cortada en juliana. Una vez haya empezado a dorarse coloca de nuevo el trozo de carne en la olla.

Es el momento de añadir el caldo y el agua para cubrir el trozo de cerdo. En olla rápida solo serán necesarios 50 minutos para que la carne quede tierna y se pueda desmenuzar nuestro pulled pork con los dedos. Si eliges una olla normal tardara de 5 a 7 horas aproximadamente en estar lista la carne.

Acompáñalo con salsa barbacoa

Una vez el cerdo está cocinado, déjalo reposar y enfriar al menos durante media hora para no quemarnos. El caldo que ha quedado en la olla sigue teniéndolo en el fuego a temperatura suave para que se forme una salsa.

Con un cuchillo y tenedor o con los dedos, desmigaja la carne. Una vez la hayas separado del hueso ponla en una sartén, vierte por encima la salsa y cocínalo durante 5 o 6 minutos, añade la cebolla a la carne y remueve. Si te gusta la salsa barbacoa es el momento de añadirla.

Una vez está lista puedes comerla de muchas formas, puedes acompañar esta carne con un puré de patata, unas patatas fritas o preparar un delicioso montadito de pulled pork. Otra ventaja de esta receta es que puedes hacer gran cantidad y congelarla en porciones para sacar cuando apetezca.