Budín de pan

Receta completa

El budín, también conocido con el nombre de pudín, es un tipo de dulce originario de la gastronomía inglesa y americana. En la actualidad existen muchas recetas diferentes de budín, pudiendo encontrarlo tanto dulce como en su variante salada. De chocolate, limón, vainilla... el budín puede prepararse con diferentes ingredientes y lo normal es que, si éste es dulce, vaya cubierto de caramelo y acompañado de un poco de nata. Se trata de un postre perfecto para una comida familiar o una cena con amigos, sobre todo ahora que se acerca la Navidad, y que gusta tanto a pequeños como a mayores por su dulce sabor y su suave y ligera textura. A continuación, te mostramos cómo cocinar un delicioso budín de pan con el que sorprender a tus invitados.

El budín de pan es una receta muy fácil de hacer y muy rica

Elaboración

Lo más importante para que este postre salga bien es el pan, que tendrá que ser viejo pero no demasiado duro. Por eso, lo mejor es utilizar los restos que hayan sobrado del día anterior. El primer paso será empezar a preparar el caramelo que cubrirá la parte superior del budín. Para ello, pon un pequeño recipiente al fuego y echa poco a poco 150 gramos de azúcar en él. Remueve constantemente con una cuchara de madera mientras echas el azúcar y deja que se caliente hasta que adquiera un bonito tono dorado claro. Si lo prefieres, también puedes derretir el caramelo al baño María.

Cuando ya tengas el caramelo preparado, coge el molde en el que vas a hacer el postre. Éste deberá ser redondo y con un pequeño cilindro en el centro para que el budín tenga forma de rosca. Vierte el caramelo en el molde y muévelo para distribuir equitativamente todo el líquido por la base y paredes del recipiente. Luego resérvalo y deja que se enfríe mientras comienzas a preparar el budín. Para ello, corta el pan viejo en trozos pequeños y ponlos en un bol. A continuación, calienta un poco la mitad de la leche hasta que ésta esté tibia. Ahora viene el paso más importante de la receta: remojar el pan en la leche. Para ello, incorpora el líquido al bol donde está el pan cortado y deja que éste se vaya ablandando y mezclando con la leche. Si ves que necesitas más leche puedes incorporar algo más de la mitad.

Mientras el pan está a remojo, en otro bol mezcla los 7 huevos, 200 g. de azúcar y el resto de la leche. A la mezcla incorpora también un poco de la piel del limón rayado, que la dará al postre una nota cítrica. Si quieres, también puedes agregar algunas gotitas de esencia de vainilla que le dará un toque más dulce al resultado final. Remueve todos los ingredientes hasta que todo esté perfectamente ligado. A continuación, incorpora el pan mezclado con la leche y mezcla todo hasta conseguir una masa de un color tostado. No te preocupes si quedan grumos, ya que la textura ideal es una masa en la que el pan no esté del todo disuelto. Vierte la masa en el molde ya caramelizado, que tendrá que haberse enfriado lo suficiente como para que el caramelo se haya solidificado.

Prueba esta deliciosa receta

Ahora es el momento de hornear el budín al baño María, al igual que se hace cuando se prepara un flan. Para ello necesitarás una bandeja de horno con una profundidad de, aproximadamente 2 cm de alto. Llena la bandeja de agua hasta la mitad y pon encima el molde con el budín. Mételo en el horno durante una hora, aunque el tiempo de cocinado varía según el tipo de horno. Una vez pasado el tiempo y cuando haya adquirido un tono dorado, es el momento de sacarlo. Deja que se temple sobre la rejilla del horno antes de desmoldarlo. Cuando se haya enfriado, vuelca con cuidado el molde sobre una fuente y ya tendrás listo este delicioso budín de pan cubierto de caramelo. A la hora de servirlo puedes decorarlo con un poco de nata, chocolate fundido o una bola de helado. ¡Estará de rechupete!

Ahora ya sabes cómo preparar este delicioso budín de pan, un postre que es perfecto para poner el punto dulce a las comidas y cenas navideñas que ya están a la vuelta de la esquina. Su textura diferente es perfecta para combinar con turrones y mantecados y su cobertura de caramelo hará las delicias de los más glotones. Si te animas, también puedes probar a hacer otras variantes como el budín de chocolate con arándanos, plátano o nueces o una variante con sabores más cítricos usando limón, naranja o mandarina. Seguro que tus amigos y familiares se quedan con la boca abierta y te felicitan por tus dotes culinarias mientras disfrutan de este riquísimo dulce casero.