Receta completa
Con la llegada de los meses de intenso calor son muchas las ganas de refrescarse con batidos, con agua y, ¿Porqué no? ¡Con helados! Además, a los más pequeños de la casa les encanta.
Se trata de una receta muy baja en calorías y si lo que se busca es potenciar esta faceta aún más, un buen consejo es sustituir el azúcar por edulcorante sin calorías. A pesar de tener un tamaño mas bien pequeño, es un postre que suele saciar bastante el apetito, dado su elevado aporte en proteínas.
De la misma manera el arándano aporta cierta cantidad de fibra y el yogurt hace un buen aporte de calcio, con todo esto se puede hablar de una receta sabrosa, además de muy completa nutricionalmente.
Elaboración
En primer lugar es necesario lavar los arándanos para posteriormente secarlos, en este punto es importante no romper los arándanos dado que son un fruto bastante frágil. Acto seguido, en un recipiente de cristal hay que mezclar el yogurt natural junto con el azúcar, para después agregar los arándanos. En este punto es clave mezclar los elementos hasta conseguir una masa homogénea. Posteriormente hay que rellenar los moldes para los helados con la mezcla que recientemente se ha obtenido. Resulta bastante útil colcar un palo de madera a modo de mango para facilitar la ingesta.
Finalmente, hay que colocar los polos en el congelador y esperar mínimo 2 horas hasta que se congelen y se queden duros, una vez conseguido solamente queda retirar la funda o molde. ¡Y listos para consumir!
Comentarios