Croissants de chocolate

Pegarse un capricho de vez en cuando no está mal y no va pasar nada por saltarse la dieta por una vez. Eso sí, si vas a saciar un antojo de bollería, mejor que sea con una receta casera. Los croissants de chocolate están buenísimosy los que se han hecho por uno mismo son la opción ideal para sorprender a la famlia a la hora del desayunoo de la merienda, ¡anímate a prepararlos y aliméntate como un auténtico francés!

Elaboración

Los croissants de chocolate son la opción ideal para desayunar y pegarse un capricho

Una vez listo, se dejará enfriar la mezcla y se extenderá la masa de hojaldre sobre una superficie plana y ancha, para facilitar el trabajo. La masa debe cortarse dos veces por la mitad, formando una cruz cuyos segmentos se crucen en el centro del círculo. De este modo, se obtendran cuatro grandes triángulos de hojaldre que, a su vez, deberán dividirse en otros tres más pequeños. El resultado deberán ser 12 trozos de hojaldreen forma de triángulo isósceles. Por último, se debe hacer otro corte a la mitad de la base, de unos 3 centímetros de largo hasta la cúspide.

Una vez estén todos los pedazos listos, se recuperará el chocolate y la mantequilla de dónde se han dejado enfriando. Con una cuchara pequeña, se debe colocar un poco de la mezcla en el centro de cada triángulo. Posteriormente, se comenzará a enrrollar partiendo de la base hasta la punta, abriendo un poco los extremos con la ayuda del corte que se ha hecho previamente. Cuando este liado del todo, se deben girar un poco las puntas para darle al croissant su típica forma de media luna.

Este es el aspecto final que deberían tener los croissants de chocolate

Mientras se pone el hornoa precalentar a 180 grados, debe batirse el huevo para bañar los croissants. Esto les dará un color doradoque los hará todavia más apetecibles. Servirse de una brocha para extender bien el huevo es una buena idea que mejorará el aspecto final de la receta. Cuando estén todos los croissants cubiertos de huevo, se hornearán durante unos 35 o 40 mintuos. Cuando la masa de hojaldre haya crecido y los bollos estén tostados será el momento de sacarlos. Se pueden dejar enfriar o comerlos recién hechos, pero con cuidado de no quemarse. El último paso es disfrutar de su fantástico sabor y repetir tantas veces se quiera.

- Puedes personalizar tus croissants añadiendo trocitos pequeños de almendra, azúcar glass o birturas de chocolate. El único límite lo pone la imaginación.