Sorbete de mandarina

La mandarina es una fruta muy beneficiosa para nuestra salud. Es una fruta rica en vitamina A y vitamina C entre muchas otras, y además, posee antioxidantes que nos mejoran la piel, fortalece el sistema inmune y contiene mucha fibra que nos hace bajar los niveles de insulina. Tiene un sabor peculiar, parecido a la naranja, pero más cómoda de consumir por su tamaño. Hoy te proponemos una forma diferente de consumir dicha fruta, si por ejemplo tienes invitados en casa. Un perfecto sorbete de mandarina para la hora de la sobremesa.

ELABORACIÓN

Vamos a comenzar a preparar nuestro sorbete de mandarina. En primer lugar, lava con abundante agua la mandarina y ralla la piel de la mandarina con un rallador. En un cazo echa los 200 mililitros de agua con el azúcar, añade también la ralladura de mandarina que acabamos de preparar. En el fuego se formará un almíbar y debes dejarlo durante 5 minutos una vez que hierva.

Saludable sorbete de mandarina

Es el momento de preparar el zumo de mandarina, para ello pela las mandarinas y quita toda la parte blanca que puedas, esta parte de la fruta amarga y dará un mal sabor a nuestro sorbete. Retira también las pepitas que pueda contener la fruta para evitar tropezones y exprímela. Deberás sacar un vaso de zumo, aproximadamente de 200 mililitros. Para mezclar el zumo con el almíbar este debe estar templado, exprime también medio zumo de limón y mézclalo todo en un bol grande o tarro. Una vez estos ingredientes están bien mezclados , mete el tarro al congelador durante una hora.

Pasada la hora debes sacarlo, remover y volverlo a meter al congelador. Transcurrida otra hora vamos a montar las claras de los dos huevos a punto de nieve. Saca la mezcla del refrigerador y mezcla con las dos claras al punto de nieve, este proceso debes hacerlo de forma suave para que no se bajen las claras. Vuelve a tapar la mezcla y al congelador. Ya, por último, deben pasar 6 horas para poder consumir nuestro sorbete. Sácalo 20 minutos antes y puedes ponerlo en una copa de sorbete o como bola de helado, para tomarlo con cucharilla. Es una receta sencilla de hacer, lo único que debes tener en cuenta es el tiempo que debe estar en el congelador el sorbete de mandarina.